18 de marzo de 2019 - ¡Qué mejor manera de celebrar este día tan especial que compartiendo una copa de vino con tu padre! Regalar vino es regalar tiempo, pues es la excusa perfecta para pasar un rato agradable con tu familia. El Día del Padre es una fecha para homenajear a los papás y agradecerles todo lo que hacen por nosotros. Sin embargo, este día está lleno de peculiaridades.
¿Sabías que no se celebra de igual forma en todo el mundo? Además, la fecha en la que se conmemora también varía según el país, como las costumbres. Por lo general, existen dos fechas significativas: el 19 de marzo y el primer domingo de junio. Mientras que por influencia de la religión católica, gran parte de los países europeos lo celebran el 19 de marzo, día de San José, otros tantos países del mundo lo celebran el primer domingo de junio, siguiendo la tradición estadounidense. A pesar de ello, una cosa hay en común: el Día del Padre se caracteriza por hacerles regalos y realizar diferentes actividades en familia, como, por ejemplo, comer todos juntos.
Regalar vino para descorchar historias
El vino es un producto vivo y lleno de matices, por lo que no hay dos botellas iguales. De esta forma, si optas por obsequiar con una botella tu regalo será único. Si lo quieres hacer aún más exclusivo y emotivo, existen opciones que te permiten personalizar tu botella como más te guste, ya sea poniendo el nombre de tu padre, un bonito mensaje o, incluso, añadiendo una foto. Díselo Con Vino o Tu Vino Personalizado son dos alternativas posibles.
Por todos estos motivos, el vino es la opción perfecta y, además, hay uno para cada tipo de padre. Si hacemos caso al estudio de “Caracterización del consumidor español de vino” elaborado hace unos años por el Observatorio Español del Mercado del Vino podríamos encontrar seis tipos: tradicional, urbanita inquieto, trendy, rutinario, ocasional Interesado y social. Sentimos decir que solo tú conoces a tu progenitor y estamos seguros que acertarás. Recuerda que tu padre es esa persona que cambió su llavero de diseño por el que le regalaste pintado a mano o que aún conserva el retrato que le hiciste con macarrones en la escuela. De cualquier forma, siempre puedes ayudarte del dependiente de tu tienda de vinos habitual o de las diferentes guías de vinos disponibles en el mercado.
El mejor regalo es el tiempo que dedicamos a nuestros seres queridos. Así que este año regala un vino a tu padre, apagad los móviles (o ponedlos por lo menos en silencio) y descorchad vuestras historias delante de una buena copa de vino. ¡Feliz Día del Padre!